Connect with us

Hi, what are you looking for?

Sociedad

Con una audiencia exprés, empezó el segundo juicio por Débora Pérez Volpin: el ex director de la clínica, acusado de encubrimiento

  • Roberto Martingano estaba a cargo del Sanatorio de la Trinidad Palermo.

Con una audiencia exprés que duró menos de dos horas, este viernes comenzó el segundo juicio por la muerte de la periodista y legisladora Débora Pérez Volpin (51). El principal acusado, Roberto Martingano, ex director del Sanatorio de la Trinidad, a quien se lo imputa por el supuesto encubrimiento de las responsabilidades del personal de esa clínica en la muerte de

Pérez Volpin falleció en esa clínica porteña el 6 de febrero de 2018 durante una videoendoscopía, un procedimiento de rutina.

Por su muerte, el endoscopista a cargo del procedimiento, Diego Bialolenkier, fue condenado en un primer juicio a tres años de prisión en suspenso e inhabilitación para ejercer la medicina por siete años y seis meses. En ese mismo expediente, la anestesista Nélida Puente resultó absuelta.

Roberto Martingano, ex director del Sanatorio de la Trinidad, está siendo juzgado ahora por el delito de encubrimiento y la instrumentadora Miriam Eliana Frías por falso testimonio, por el que podría recibir una condena de hasta cuatro años. El juicio lo sigue el Tribunal Oral y Criminal N° 26.

Este viernes les leyeron las acusaciones a los imputados y estaba previsto que declararan, pero sólo lo hizo la instrumentadora.

“Voy a declarar en el devenir de las sesiones”, dijo Martingano.

Frías, la instrumentadora de 44 años acusada por falso testimonio, sí declaró este viernes, aunque se negó a contestar preguntas: “Quiero que quede en claro que en ningún momento ni mentí ni oculté información. Lo que no pude responder, o no lo vi o no lo recordé. Quien escucha esto piensa que solo dije ‘no recuerdo’, pero no fue así”,

A su vez, Frías puntualizó que al momento de prestar declaración estaba bajo mucho “estrés”, cursando un embarazo de riesgo y bajo el asedio de periodistas, y al ser citada a indagatoria un año y medio después, estaba puérpera, con su bebé recién nacido.

Las audiencias se retomarán el próximo miércoles, con las declaraciones de testigos.

La imputación por encubrimiento al ex director

En la entrada del tribunal, la fiscal Diana Goral aseguró a Clarín que las pruebas contra Martingano son “muy sólidas”.

“En la parte investigativa llegamos a determinar una serie de cuestiones que veníamos con la duda después de la sentencia del Tribunal Oral 8. Inclusive la semana pasada hicimos una inspección en la Trinidad, se va a demostrar en el juicio que el doctor Martingano hizo lo posible para que no se demuestre la verdad de lo que pasó ese día”, expresó.

“Ya está condenado el médico que hizo la intervención, pero él aportó nada más y nada menos que toda la aparatología que no correspondía al momento en que se hizo la intervención”, remarcó.

Los familiares de Pérez Volpin, en la sala de audiencias. Foto: Luciano Thieberger Los familiares de Pérez Volpin, en la sala de audiencias. Foto: Luciano Thieberger

En la misma línea se expresó Diego Pirota, abogado de la familia de la periodista, quien aseguró que tras cinco años de la muerte de Pérez Volpin se sabe qué pasó y hay una condena firme al responsable, pero que sus familiares “nunca recibieron una explicación de la clínica”.

“Lo que hicieron fue nada menos que encubrir el homicidio de Débora. Hicieron las maniobras que hicieron para que no se conozca la verdad”, dijo Pirota, y remarcó que “la Justicia los denunció, no nosotros”, en referencia a que esta nueva investigación sobre los responsables del encubrimiento fue impulsada por el tribunal que condenó al endoscopista.

La fiscal (a la derecha) y los abogados de la familia de Pérez Volpin. Foto: Luciano Thieberger La fiscal (a la derecha) y los abogados de la familia de Pérez Volpin. Foto: Luciano Thieberger

Uno de los ejes centrales que se debatirá en este juicio tiene que ver con el endoscopio. Pirota dijo que “Martingano en persona nos lo dio, se peritó y se vio que no funcionaba, no encendía hacía años. En esta nueva causa se vio además que no tenía autorización de la ANMAT para ser utilizado y no había sido ingresado legalmente a la Argentina”.

“Con ese endoscopio no atendieron a Débora”, insistió, y aseguró que tienen un acta de allanamiento “con la firma de Martingano”.

También antes de ingresar a la sala, Vadim Mischanchuk, abogado de Martingano, rechazó todas las acusaciones respecto de su cliente.

Vadim Mischanchuk, abogado de Martingano, antes de entrar al tribunal. Foto: Luciano Thieberger Vadim Mischanchuk, abogado de Martingano, antes de entrar al tribunal. Foto: Luciano Thieberger

“Con las pruebas que hay en el expediente más las que se van a producir en el juicio oral va a quedar acreditado que no sólo no encubrió sino que abrió las puertas de la clínica y en ese allanamiento otras personas voluntariamente aportaron los dos elementos que ahora se cuestionan en este juicio”, explicó.

Los elementos a los que se refiere son el endoscopio y las impresiones del equipo multiparamétrico, el que registra todos los parámetros que se monitorean al paciente durante la práctica, como la frecuencia cardíaca y el oxígeno. Según la querella, Martingano extrajo las hojas que estaban en blanco de ese informe porque demostraban que Pérez Volpin no había sido monitoreada correctamente.

Débora Pérez Volpin tenía 51 años. Débora Pérez Volpin tenía 51 años.

Mischanchuk aseguró que es falso que se haya cambiado el endoscopio y que esa máquina es la que se usó en la endoscopia de Pérez Volpin y en un estudio posterior.

“Es incorrecto que el equipo no funcionaba. La pericia no lo dice. Lo que dice es que hacía un tiempo que la máquina no guardaba imágenes. Cuando uno hace estos estudios en el quirófano, la máquina no guarda las imágenes porque el personal lo ve en vivo y si hay que operar o hacer alguna intervención, la realiza en el momento”, señaló.

Respecto del número de serie del endoscopio, que en el primer juicio se reveló que estaba limado, dijo que “no está legible, pero a partir de una pericia se pudo determinar cuál es y cuál es la trazabilidad y cuándo fue comprado”.

La situación de la instrumentadora

Además de Martingano, en este juicio se juzga a Frías, la instrumentadora quirúrgica que estaba en el quirófano junto a Bialolenkier y a Puente. Es la única testigo, además de los dos médicos ya juzgados, de lo que sucedió ese martes de verano cuando un procedimiento de rutina terminó en la muerte de la paciente.

Fue además la encargada de solicitar ayuda cuando empezaron las complicaciones en el estudio, después de que el endoscopista y la anestesista le pidieron que llamara de manera urgente a la cardióloga de turno

Frías declaró como testigo en el primer juicio. Ahora está acusada por falso testimonio. “Fue la única que estando en el quirófano y viendo todo lo que pasó, más de 15 veces dijo ‘No recuerdo’”, destacó Pirota.

Contáctese con la Producción de Catamarca Play 383 4 351218

También le puede interesar