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El atacante se había ofrecido a ir con ella porque era riesgoso que caminara sola, en Oberá, Misiones.
Una joven denunció que un amigo que el domingo a la noche la acompañó hasta su casa, para que no regresara sola, la violó tras ingresar a la vivienda con la excusa de utilizar el baño.
El hecho se prolongó a lo largo de toda la madrugada y fue filmado por el atacante, que amenazó con divulgar las imágenes si la víctima realizaba la denuncia.
La investigación se disparó el lunes a primera hora cuando la chica, de 20 años, se presentó en la Comisaría de la Mujer de Oberá.
En esa presentación aportó la identidad del atacante y las circunstancias en que se habían encontrando en la zona céntrica de la ciudad.
Según su relato, Marcelo José D. (23) le propuso acompañarla hasta su departamento debido a que era peligroso que caminara sola a esa hora de la noche. La víctima aceptó porque era una persona con la que tenía confianza.
Cuando llegaron al inquilinato y se imponía la despedida, el hombre le pidió permiso para usar el baño de la habitación. La joven accedió por tratarse de una persona con la que la unía un lazo de amistad.
Según su relato, apenas salió del baño, el joven la tomó del cuello y sacó de entre sus ropas un cuchillo con el que la amenazó de muerte.
Los abusos se mantuvieron a lo largo de toda la madrugada. El sospechoso incluso la obligó a cambiarse de ropa en varias ocasiones y filmó todo con su celular.
Antes de abandonar el departamento, le advirtió a la víctima que si lo denunciaba, viralizaría esas imágenes a través de redes sociales y aplicaciones.
Apenas el agresor se retiró del departamento, la chica se dirigió a la Comisaría de la Mujer para hacer la denuncia.
El juez de Instrucción Horacio Alarcón dispuso la inmediata intervención del Gabinete de Asistencia Forense para víctimas de abuso sexual, ya que el violador no utilizó profilácticos.
El magistrado también dispuso que se haga un hisopado a la joven en busca de material biológico del atacante y se aplicaran los protocolos sanitarios establecidos para estos casos.
A los policías de la División Investigaciones de Oberá no les llevó mucho tiempo ubicar al acusado. Lo detuvieron en su casa, sobre la calle Mar del Plata al 200. Además, se le secuestró el teléfono celular Samsung J7, que deberá ser peritado en busca de la filmación del abuso.
El joven quedó alojado en un calabozo, acusado del delito de “abuso sexual con acceso carnal y amenazas“, dijeron voceros de la Policía de Misiones.
